Bush asegura que quiere cerrar Guantánamo y la UE le ofrece ayuda
EP/Viena
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, dijo hoy que comprende la «preocupación» de la Unión Europea por la existencia del centro de detención de Guantánamo (Cuba), y aseguró que a él también le gustaría cerrarlo y enviar a los presos a sus países de origen, aunque precisó que algunos de ellos son «asesinos sangrientos» que tienen que ser juzgados por tribunales norteamericanos.
Durante la cumbre entre UE y Estados Unidos, fue el propio Bush el que planteó el tema de Guantánamo, antes incluso de que los líderes europeos le pidieran su cierre tal y como tenían previsto, según explicó el canciller austriaco y presidente de turno de la UE, Wolfgang Schuessel.
Lo mismo ocurrió durante la rueda de prensa, donde el presidente estadounidense habló del centro de detención en Cuba por su propia iniciativa, antes de llegar al turno de preguntas. «Yo también quiero cerrar Guantánamo», aseguró. Según el mandatario, el objetivo es que los prisioneros regresen a sus países de origen. Explicó que 200 ya han sido enviados de vuelta y quedan alrededor de 400, procedentes de Arabia Saudí, Afganistán y Yemen.
No obstante, señaló que existe «presión internacional» para que no se realicen estas devoluciones. No todos los prisioneros volverán a sus países de origen porque algunos, cuyo número no preciso, son «asesinos sangrientos» y serán juzgados en tribunales norteamericanos. «Asesinarían a alguien si se les soltara en la calle», señaló Bush, añadiendo que está esperando que el Tribunal Supremo de Estados Unidos determine si corresponde a la justicia civil o militar juzgar a estas personas.
«Comprendo las preocupaciones que me han expresado los líderes europeos sobre lo que significa Guantánamo, compartí con ellos mi profundo deseo de acabar con este programa, pero también les aseguré que no voy a dejar en la calle a gente que haga daño», insistió. Por su parte, el canciller austriaco señaló que la discusión de este miércoles fue «más allá» del cierre de Guantánamo y que la UE ofreció su colaboración.
«Tenemos que ayudar para encontrar una estrategia de salida, ayudar a los países a asumir los prisioneros, y a juzgarlos o liberarlos», dijo Schuessel, reclamando la colaboración de las organizaciones humanitarias. Al mismo tiempo, insistió en la necesidad de que se respeten los derechos fundamentales y se acabe con «zonas grises» y «vacíos legales». Subrayó que había recibido de Bush «señales claras y compromisos claros» de que no habrá torturas ni entregas extraordinarias de terroristas.
En la declaración conjunta suscrita al final de la cumbre por la UE y Estados Unidos no se hace ninguna mención específica a Guantánamo ni tampoco a los vuelos de la CIA en territorio europeo, aunque sí que hay una declaración genérica de principios. «Garantizaremos que las medidas que se tomen para combatir el terrorismo respeten plenamente nuestras obligaciones internacionales, incluyendo la legislación de Derechos Humanos, la legislación sobre refugiados y la legislación humanitaria internacional», señala el texto.