Condenado a prisión por exaltar el odio a la mujer y el terrorismo en Twitter
Berenguer Jordi Moya Hernández, un tuitero de 21 años, ha sido condenado a dos años de cárcel por delito de enaltecimiento al odio y otro al terrorismo sobre los comentarios publicados en la red social Twitter sobre la violencia de género y el terrorismo yihadista.
La investigación comenzó después de que la unidad policial dedicada al control, seguimiento y análisis de los contenidos publicados en las redes sociales recibiera correos electrónicos denunciando los comentarios sobre violencia de género publicados por el tuitero. El resultado de la investigación dio con dos cuentas en Twitter de Moya Hernández creadas hace cuatro y tres años y con un total de 2 mil seguidores.
Tras las quejas Twitter cerró una de las cuentas, pero el acusado decidió seguir con la exaltación al odio y al terrorismo en la segunda cuenta.
La Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, presidida por Ángela Murillo, ha manifestado que Berenguer Jordi Moya estaba «denigrando al colectivo de las mujeres, por el hecho de serlo», según la sentencia condenatoria, fechada el pasado 26 de enero.
La juez Teresa Palacios considera “imposible” de pensar que el texto empleado en los mensajes «fuera para llamar la atención sobre la violencia» de género. Destacada que “lo que revelan es todo menos una preocupación», sin pasar por alto que «lo que denotan es justamente lo contrario al sentir general».
El tribunal le condena a dos años por los tweets publicados en los meses de diciembre de 2015 y enero de 2016. Estos son algunos de los tweets: «53 asesinadas por violencia de género machista en lo que va de año, pocas me parecen con la de putas que hay sueltas», «Y 2015 finalizará con 56 asesinadas, no es una buena marca, pero se hizo lo que se pudo, a ver si en 2016 doblamos esa cifra, gracias», «Ya tengo los explosivos preparados para esta noche liarla en Sol, Feliz Año, Alá en grande» y «Ahora sólo falta un atentado en Madrid, unos cuantos españoles muertos y un 2015 de puta madre».»Ya no se ven atentados como los del 11S, estos de la Yihad no valen, si van a masacrar a gente que lo hagan con estilo, vuelve Bin Laden», «Marta del Castillo era feminista y se tiró al río porque las mujeres se mojan por la igualdad», «A mí me gusta follar contra la encimera y los fogones, porque pongo a la mujer en su sitio por parte doble» y «Ya la he maltratado, tú eres la siguiente». Este último acompañado de la fotografía de una mujer.
El tribunal defiende que estos comentarios publicados en la red social no se pueden considerar libertad de expresión y destaca que este derecho no ampara la exaltación al terrorismo. Por ello, las conductas de Moya Hernández son penales.
La declaración en el juicio del twitero se remite a que «en esa época era un inconsciente, sin saber a cuánta gente llegaba». Incluso ha llegado a defender que se trataba de un «experimento sociológico que se le había ido de las manos, en plan broma o de humor negro», alegando «ignorancia en estos temas».
La respuesta del tribunal ante estas justificaciones es que «no es calificable de broma ni de humor negro nada de lo que el acusado ha escrito a través de las redes sociales». Recordando que «lo que fluye es la idea de ensalzar esas acciones» y que «no es fruto de la inconsciencia».
En GuíaONGs tenemos una petición que está cogiendo fuerza contra los insultos en las redes sociales. ¡Firma!
