El banco de los pobres y su creador reciben el Nobel de la Paz
Europa Press/Oslo
El bangladeshí Muhammad Yunus y la entidad de microcréditos Grameen Bank, fundada por él en 1976, han obtenido el Premio Nobel de la Paz 2006 «por sus esfuerzos para crear un desarrollo económico y social desde abajo», según informó la Academia noruega. Muhammad Yunus es el creador de un mecanismo de microcréditos solidarios para los sectores más pobres de la sociedad, que ha beneficiado a tres millones y medio de personas, en su gran mayoría mujeres, y cuyo éxito ha atraído el interés de otros países.
«Estoy muy feliz, es realmente una gran noticia para toda la nación», declaró Yunus a Associated Press desde Dacca, poco después del anuncio de la concesión del Premio. El Nobel «me animará a dedicarme aún más a mejorar la vida de los pobres» y «será una fuente de inspiración para el futuro», declaró posteriormente ante los periodistas el galardonado, quien advirtió de que «hay un vínculo entre la paz y la pobreza».
Se trata de «un honor para millones de mujeres pobres que lo han hecho posible, es un gran éxito, un maravilloso reconocimiento», afirmó un colaborador de Yunus, Dipal Barua. Por su parte, la primera ministra de Bangladesh, Jaleda Zia, felicitó a Yunus, quien «ha traído un gran honor a este país».
Según el Comité Nobel, «la paz duradera no será posible a menos que amplios grupos de población encuentren la forma de poner fin a la pobreza». Por ello, «los microcréditos constituyen uno de esos medios». «La desarrollo desde abajo también ayuda al avance de la democracia y los Derechos Humanos», añadió el comunicado del Comité.
Muhammad Yunus, economista por la Universidad Vanderbilt (Estados Unidos), nació en 1940 e impartió clases en Tennessee antes de regresar a su país natal -que acababa de independizarse- para dirigir el Departamento de Economía Rural de la Universidad de Chittagong, cargo que ejerció hasta 1989.
En 1974, en medio de una profunda hambruna en Bangladesh -uno de los países más pobres y poblados del mundo-, el joven profesor Yunus propuso la creación de un sistema de aldeas rurales (el ‘Gram Sarker’, gobierno rural) que en 1980 fue adoptado oficialmente por el propio Gobierno. «Decidí que debía renunciar a todo lo que había aprendido en las aulas para intentar simplemente ser un ser humano y buscar un modo de ser útil a otros seres humanos», declaró Yunus.
Fue gracias a este proyecto que el economista comprobó que sólo se podía superar la pobreza mediante un mecanismo de microcréditos solidarios sin garantía para que los sectores más pobres pudieran llevar a cabo actividades independientes y creativas.
El resultado fue la creación, contra viento y marea y pese a la oposición de la banca de su país, del Grameen Bank (Banco Rural, ‘grameen’ significa ‘rural’ en lengua bengalí), que desde entonces ha beneficiado a tres millones y medio de personas, en su gran mayoría mujeres. El proyecto fue fundado en 1976, pero su autorización legal como banco de pleno derecho no llegó hasta 1983.