Greenpeace critica la falta de compromiso de Zapatero para cerrar nucleares
EP/Madrid
Las organizaciones Greenpeace y Ecologistas en Acción lamentaron este martes la ausencia de mención alguna al cierre de las nucleares en el discurso del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en su primera intervención en el Debate sobre el Estado de la Nación. Esta omisión supone, para los ecologistas, «dar luz verde al funcionamiento durante tiempo indefinido de las centrales nucleares».
El presidente del Ejecutivo no ha hecho mención alguna al compromiso electoral y de Gobierno de cerrar las centrales nucleares y sustituirlas por «energías más limpias, más seguras y menos costosas», advierten los ecologistas, que echan de menos una aparición del Gobierno en el debate público sobre el futuro de la energía en España. Esta omisión supone para ambas organizaciones «el incumplimiento del compromiso electoral del PSOE de proceder al cierre escalonado de las nucleares, sustituyéndolas por energías limpias».
El portavoz de la Campaña Nuclear de Greenpeace, Carlos Bravo, manifestó que «el cierre escalonado de las nucleares españolas, empezando por Garoña, es perfectamente posible y necesario. Esperamos que Zapatero sea consecuente con sus compromisos electorales, no defraude las expectativas de los ciudadanos y ponga sobre la mesa un calendario de cierre durante el presente debate».
«Esperamos que el presidente anuncie de forma clara la elaboración de un calendario de cierre de las nucleares, empezando por la más antigua y que está en peores condiciones, que es la de Santa María de Garoña (Burgos), lo contrario sería una decepción para el ecologismo español», señaló Francisco Castejón, de Ecologistas en Acción.
El alargamiento de la vida de las centrales nucleares supondría, para ambos colectivos, «un empeoramiento de las condiciones de las plantas y un incremento de la inseguridad». Además, apuntaron que sin ir más lejos, se acaba de producir una parada de la central nuclear de Ascó II (Tarragona) por una fuga a la contención de su circuito primario de refrigeración. Este incidente ha ocurrido poco después de que Ascó II cumpla los 20 años de funcionamiento (su explotación comercial empezó en marzo de 1986) y es «un ejemplo del agotamiento creciente de la vida útil de las centrales nucleares españolas y de lo peligroso de mantener en funcionamiento unas centrales cada vez más deterioradas».
