Haití, dos años después del terremoto
El 12 de enero de 2010 la tierra tembló en Haití. Un terremoto de 7,2 grados en la escala Richter asoló la capital del país, Puerto Príncipe, y sus alrededores. Murieron más de 220.000 personas, 300.000 heridos y dejo viviendo en campamentos de desplazados a un millón y medio de personas. Dos años después del seísmo las cicatrices siguen estando muy presentes en las calles, donde los escombros se amontonan junto a socavones aún abiertos. La peor herida, es la de muchos de los supervivientes que siguen sufriendo secuelas físicas y psicológicas.
Según un estudio elaborado por Intermón Oxfam, alrededor de 520.000 personas siguen viviendo bajo lonas o tiendas de campaña debido a la lentitud de la reconstrucción del país. Desde este estudio llamado “Haití: El lento camino hacia la reconstrucción. Dos años después del terremoto” se hace un llamamiento a la comunidad internacional para que contribuya a fortalecer la capacidad del gobierno haitiano y coordinar fuerzas que contribuyan a una rápida recuperación del país.
Hasta ahora, miles de millones de dinero se han comprometido para las labores de reconstrucción. El problema es que en muchas ocasiones las promesas no se cumplen y el dinero no llega. Según estimaciones de la ONU, de los 4.600 millones de dólares comprometidos por los donantes en 2010 y 2011, sólo se había entregado el 43% de los mismos a finales de septiembre de este año. Para la directora general de Intermón, el apoyo de los donantes y las donaciones son cruciales para un gobierno como el de Haití en el que el 70% del presupuesto depende de la ayuda al desarrollo. La reconstrucción de Haití es crucial para sus habitantes, muchos de ellos sin acceso a servicios básicos ni oportunidades para construir un futuro mejor.
La ayuda del Gobierno español a Haití
En este sentido, el Gobierno español, tercer donante bilateral, tiene un compromiso con Haití de 346 millones de euros para el periodo 2012-2013 y como socio privilegiado del Gobierno haitiano que ha tenido voz y voto en la Comisión Interina para Reconstrucción del país, asegurarse de que el proceso de reconstrucción se realice eficazmente y que el medio millón de personas que permanecen sin hogar dos años después sean realojados adecuadamente y teniendo en cuenta sus necesidades. Para la portavoz de Intermón Oxfam, Lourdes Benavides, este segundo aniversario del devastador terremoto debe ser una llamada de acción y hacer que la élite política y económica haga frente a la pobreza crónica y la desigualdad que ha asolado al país.
La labor de las ONG en Haití
Durante estos dos años, han sido muchas las ONG que han contribuido poco a poco a la reconstrucción del país y así poder mejorar las condiciones de vida de los haitianos. Por ejemplo MSF ha colaborado con la apertura de hospitales y otras infraestructuras sanitarias para paliar enfermedades y epidemias. Tras el terremoto, una grave epidemia de cólera afectó al país, unas 500.000 personas resultaron afectadas debido a las deficientes condiciones higiénicas y sanitarias tras el temblor. Igualmente, MSF trata de ayudar especialmente a colectivos más vulnerables como mujeres embarazadas.
Oxfam ha sido otra de las ONG que han colaborado en la reconstrucción del país. Ha proporcionado ayuda a más de un millón de personas a través de la respuesta de emergencia del terremoto y el trabajo de prevención del cólera. En 2011, la organización ha comenzado a modificar su enfoque de trabajo de las necesidades de emergencia inmediatas al desarrollo a largo plazo. En este nuevo marco, colabora con organizaciones locales para fortalecer la sociedad civil y para impulsar la reconstrucción de un nuevo Haití, trabajando en la mejora al acceso al agua y saneamiento, así como en la creación de empleo tanto en Puerto Príncipe como en las zonas rurales.
MSF y Oxfam son sólo dos ejemplos de la gran ayuda que han prestado multitud de ONG en Haití.
De cara al futuro, uno de los grandes problemas a los que se enfrenta el Gobierno es la dificultad para encontrar terrenos en los que alojar a los desplazados del terremoto, de los que todavía 520.000 viven en campamentos provisionales, según la ONU. Aún así dos años después de la catástrofe, hay resquicios de esperanza entre las personas y niños de Haití gracias al trabajo de ONG, organizaciones, la sociedad civil y el propio gobierno de la isla. A pesar de que han pasado dos años es importante que Haití no se olvide y ayudemos a su reconstrucción.
