INTERVIDA recuerda que la malnutrición crónica infantil sigue creciendo en Guatemala, duplicando la media de Latinoamérica
Madrid (16/10/06). A pesar de que recientes estudios publicados por Naciones Unidas indican que América Latina y el Caribe es de las regiones bien encaminadas para la reducción de la desnutrición infantil, todavía hay 8,8 millones de menores de 5 años que sufren desnutrición crónica y hay países como Guatemala donde ésta ha aumentando en los últimos años, incrementándose del 46% en el 2000 hasta el 49% en la actualidad. Guatemala es el país con mayor incidencia de malnutrición crónica de la región, duplicando el promedio de la mayoría de los países latinoamericanos y superando incluso los promedios de Asia y África.
Una alimentación insuficiente e inadecuada en los niños menores de 5 años incrementa el riesgo de muerte y de enfermedades que afectan de manera seria a su desarrollo. En Guatemala, según UNICEF, 800.000 padecen desnutrición crónica y están en riesgo de enfermar e incluso morir. Además, más de la mitad de los menores de 5 años en el país padecen raquitismo que, en el caso de los niños indígenas, se eleva hasta el 70%, siendo la desnutrición la tercera causa de enfermedad y muerte. En las zonas rurales, los niños de edades entre 6 meses y 1 año sólo reciben el 16% de las calorías pertinentes, el 35% de proteínas y el 2% del hierro requerido.
La alta incidencia del hambre y malnutrición no es sólo cuestión de falta de alimentos sino del acceso a éstos. Dos de cada tres personas en Guatemala son demasiado pobres para alimentarse bien y una de cada tres familias no puede costear ni siquiera la mitad de la cesta mínima de alimentos. Guatemala es uno de los países con la distribución de riqueza más desigual del mundo, y la mayoría de su población (56%), en especial la indígena, es pobre y padece hambre.
A pesar de los esfuerzos de los organismos gubernamentales, privados y organizaciones humanitarias, la situación sigue siendo alarmante. INTERVIDA desde el año 2001 ha puesto en marcha diversas actividades dirigidas a combatir, desde varios frentes, la desnutrición en las comunidades dentro de su ámbito de actuación en el país. Desde el sector Salud se está actuando a través de la atención médica, con tratamientos para enfermedades relacionadas con la desnutrición, como la anemia o el parasitismo intestinal y se han realizado capacitaciones en las comunidades sobre la importancia de una adecuada nutrición.
INTERVIDA trabaja junto con las madres para aprovechar al máximo los alimentos disponibles en el hogar y en la comunidad, buscando siempre el mayor valor nutritivo posible. También dirigido a las madres está el `Programa Materno Infantil´, cuyo objetivo es atender tanto a la madre como al niño para contribuir a la reducción de enfermedades y de la mortalidad materna e infantil. A partir de este año, INTERVIDA va a reforzar sus acciones en este ámbito ampliando este programa a 340 comunidades. Durante 2006 se beneficiarán más de 144.000 personas y hasta 2012 se espera beneficiar a 130.000 más. Este programa está integrado por cuatro proyectos: atención materna; atención pediátrica; seguridad alimentaria y saneamiento ambiental.
Además, a los menores de 5 años de esas comunidades se les realiza un control de crecimiento para detectar algún grado de desnutrición, teniendo como base el indicador de peso/talla. Asimismo, se practican exámenes clínicos, se dispensan medicamentos, se elaboran planes de recuperación nutricional y se capacita a las madres en aspectos de nutrición, higiene y reconocimiento de los signos de enfermedad que más afectan a los niños.
El proyecto de seguridad alimentaria espera beneficiar en los próximos cinco años a 42.500 menores de 5 años y a 12.500 embarazadas. A partir del año que viene, se apoyará a centros estatales de recuperación nutricional, a los que se derivan los casos detectados de niños en avanzado estado de desnutrición.