INTERVIDA recuerda que las deficiencias en la infraestructura de las escuelas peruanas pone en peligro la educación de los alumnos
Madrid (21/09/06). Uno de los grandes desafíos de la sociedad peruana es garantizar a todos los niños y jóvenes de Perú una educación de calidad. Sin embargo, el sistema educativo atraviesa una grave crisis, como prueba el hecho de que fuera declarado oficialmente en emergencia durante el bienio 2003-2004, debido a su baja calidad. En la actualidad, no sólo muchos estudiantes tienen dificultades para asistir a la escuela o están excluidos de ella, sino que quienes pueden hacerlo estudian en condiciones muy precarias, circunstancia que influye negativamente en su formación. Ante esta situación, los equipos de INTERVIDA trabajan en la construcción y rehabilitación de las infraestructuras escolares, al tiempo que dotan a los centros del mobiliario y los materiales necesarios para una correcta docencia.
Perú enfrenta un serio problema de infraestructura educativa. Según datos del Ministerio de Educación, de los más de 41.500 locales educativos públicos que existen, sólo la mitad está en buenas condiciones. Además, hay 5.517 locales en estado de colapso estructural, que representan el 13% del total y constituyen una seria amenaza para 650.000 estudiantes. Muchos otros centros, aunque no corren el riesgo de caerse, también presentan deficiencias estructurales: según la Estadística Básica que elaboró en 2004 el Ministerio de Educación, más del 67% de las escuelas públicas peruanas (23.038) carecen de sistemas de saneamiento básico, el 57% de los locales (23.722) no cuentan con energía eléctrica y casi el 40% de los centros no tienen agua (16.143). Como consecuencia de esto último, más de dos millones de escolares estudian en colegios que no tienen agua.
Junto a todo lo anterior, muchos centros sufren las consecuencias de los desastres naturales, de una mala construcción por falta de asesoramiento técnico o, simplemente, ya cumplieron su vida útil. Por otro lado, los niños y niñas que acuden a muchos de esos centros educativos no cuentan con el material básico para desarrollar sus labores educativas.
Los profesionales de INTERVIDA son conscientes de que un factor decisivo a la hora de lograr una educación de calidad es el espacio físico en que se desarrolla el aprendizaje, así como los materiales y los recursos educativos. Por ello, trabajan en la mejora de las condiciones de infraestructura y equipamiento de los centros educativos de nivel primario. En los últimos nueve años INTERVIDA ha construido y rehabilitado más de 1.200 aulas. Sólo durante 2005, se reconstruyeron 107 escuelas y 16 servicios higiénicos, y se construyeron 97 nuevas aulas escolares y nueve servicios higiénicos, beneficiando a más de 200.000 escolares y 6.515 docentes.
Además, la comunidad participa en todo momento en la mejora de la infraestructura escolar aportando mano de obra, custodiando los materiales almacenados y asumiendo el compromiso de efectuar el mantenimiento de las infraestructuras construidas.
Sobre FUNDACIÓN INTERVIDA
FUNDACIÓN INTERVIDA es una ONGD aconfesional, apartidista y totalmente independiente, con estatus consultivo especial en el Consejo Económico y Social de Naciones Unidas. Su objetivo es mejorar las condiciones de vida de miles de niños y sus familias en las zonas más necesitadas del planeta. Con este fin, lleva a cabo proyectos de desarrollo integral desde diversos sectores de actividad (salud, educación, producción, seguridad alimentaria, capacitación e infraestructuras) orientados a reducir las causas de la pobreza y no sólo sus consecuencias. En la actualidad, INTERVIDA está presente en Bolivia, Ecuador, Perú, El Salvador, Guatemala, Nicaragua, Bangladesh, Filipinas, India y Malí. Más de 346.000 familias españolas dan su apoyo a casi cuatro millones de personas de estos países mediante el apadrinamiento de niños.