Mejoran las condiciones de los refugiados del conflicto libio
La movilización es posible gracias a la iniciativa de la ong Acción contra el Hambre y la financiado de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) junto con el Fondo de Emergencia de Obra Social Caja Madrid.
El equipo ha provisto a dos grupos de refugiados de materiales de limpieza para la recogida y enterramiento de excretas y residuos en el campo improvisado de Choucha, donde ya se encuentran unos 14.000 refugiados de distintas nacionalidades en espera de su repatriación a sus países de origen. Dos cuadrillas de 30 bangladíes recibirán un jornal de 30 dinares al día por este trabajo y por garantizar la salud pública en el campo.
La construcción de letrinas en la frontera es imprescindible y están pensadas de manera preventiva ante una posible nueva oleada de desplazamiento si el conflicto se recrudece y es la prioridad en esta intervención.
De momento, el equipo de emergencia no está encontrando grandes dificultades logísticas: compran todo el material necesario (carpintería, picos, palas, etc.) en el mercado local, a unos 20 km de la frontera y no hay conflictos entre la población, por lo que las condiciones de seguridad son buenas. Hay poca presencia de mujeres y niños entre los refugiados, ya que la mayoría de ellos son emigrantes llegados a Libia para trabajar.
No obstante los temores sobre lo que puede estar ocurriendo a la población civil al otro lado de la frontera son enormes: las organizaciones se sienten impotentes por no poder entrar al país, los rumores sobre la actuación de los mercenarios del Gadafi y el propio Ejército libio les hacen imaginar lo peor.