¡Que nos dejen dar de mamar a nuestros hijos tranquilas!

Soy madre de dos niños, uno de cuatro años y otro de 16 meses. Al primero le di pecho hasta que tuvo dos años y medio y, al segundo, sigo dándole de mamar.

Durante todo este tiempo he sufrido miradas ejecutoras, comentarios de asombro e indignación (que por supuesto yo no pedía) y cuchicheos, entre otros. Todo por dar de mamar a mis hijos en público.

Al menos he tenido suerte y nunca me han «echado» o llamado la atención por hacerlo en un espacio público, aunque me consta que hay personas que sí han sufrido estos desprecios.

¿Qué problema hay en ello? ¿Acaso tengo que ser criticada por hacer algo tan natural como amamantar a mi hijo? ¿Por qué tengo que aguantar que cuando doy de comer a mi bebé, y de una forma discreta, haya gente que me mire con indignación o hable por lo bajo sobre mis acciones? ¿Acaso para algo cuando una mujer hace topless en la playa?

La lactancia materna es algo que se ha practicado siempre y según varios estudios, si todas las madres diesen de mamar a sus hijos se evitarían hasta 800.000  muertes prematuras cada año. Además de ser beneficiosa para ellos, es un ahorro de dinero para las familias y previene algunas enfermedades.

Yo no critico a las personas que no dan pecho a sus hijos. Como todo, es una elección y, de hecho, no siempre se puede hacer porque en ocasiones es muy doloroso para algunas mujeres. Pero, si yo no lo critico, ¿por qué tengo que ser yo criticada por hacerlo?

Parece que en esta sociedad nada esta bien: si tu hijo es muy pequeño y le das biberón, te critican porque no es «sano» y es mejor que tomen leche materna. Por el contrario, si tu hijo es mayor de seis o siete meses y sigue tomando pecho, también te critican porque con la «teta» ya no es suficiente.

Y no hablemos de las mamás que dan pecho a sus hijos hasta los dos años o más. Yo he tenido que aguantar comentarios de todo tipo: que si esa leche ya no les alimenta, que si lo que tienen es vicio, que no es normal que sea tan mayor y siga tomando teta…

Pido al Ministerio de Sanidad una ley que proteja a las madres que quieran amamantar a sus hijos en espacios públicos. Que no nos sintamos juzgadas o malas madres por hacer esto.

Dar de mamar a tu bebé es una de las cosas más bonitas que existen, te pido tu firma para que haya una ley que nos proteja y esta práctica no se vea antinatural o como algo obsceno.

¡Ayúdame con tu firma!